viernes, 13 de junio de 2008
RESUMEN DEL CÓMIC 'Historia de la puta mili':
TAREA 7:
Los que tienen internet en casa no deberian de tener ningun problema para realizarlas pero sin embargo los que no lo tienen y no les de tiempo pierden una gran parte de su nota y eso no seria justo. Por lo demas me ha gustado todo porque me parece una actividad muy divertida y por lo menos con ella lees, resumes y aprendes mucho.
Espero que el año que viene hagamos lo mismo o algo parecido para seguir aprendiendo divirtiendonos como este año.
viernes, 6 de junio de 2008
TAREA 5
Este relato trata de una familia en la cual Ulises se marcha de casa.Todos le hechan la culpa al abuelo que es el que manda en a familia pero hay unsecreto...Pel su mujer (de Ulises) le sube comida a la habitacion de la parte alta de la casa sin que nadie se entere.
La presion la abliga a decir la verdad y se le escapa lo que esta haciendo.
El hijo de Ulises quire irse de casa porque dice que ha perdido veinte anos de su vida ese mismo dia antes de irse aparece Ulises.
El abuelo dice que le tenia que matar y meterle una bala por algun lugar pero al final dice que el tampoco tiene tantad medallas y la historia termina vien brindando por todo.
TAREA 4
El segundo relato que mas me gusta es un golpe bajo de Agustin Alonso.Porque me gusta por que tiene un entorno familiar que se parece bastante al nuestro.Puedes pasar un buen rato leyendolo y te entretiene.
*Tengo que admitir que fueron los dos primeros que lei y como quiero acabar las tareas son los dos que expongo..
viernes, 30 de mayo de 2008
TAREA 3
Caminante, son tus huellas
el camino, y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de pisar.
Caminante, no hay camino,
sino estelas en la mar.
JUAN RAMÓN JIMENEZ:
¡Qué miedo el azul del cielo!
¡Negro!
¡Negro de día, en agosto!
¡Qué miedo!
¡Qué espanto en la siesta azul!
¡Negro!
¡Negro en las rosas y el río!
¡Qué miedo!
¡Negro, de día, en mí tierra
-¡negro!-
sobre las paredes blancas!
¡ Qué miedo!
El mar. La mar.
El mar. ¡Sólo la mar!
¿Por qué me trajiste, padre,
a la ciudad?
¿Por qué me desenterraste
del mar?
En sueños la marejada
me tira del corazón;
se lo quisiera llevar.
Padre, ¿por qué me trajiste
acá? Gimiendo por ver el mar,
un marinerito en tierra
iza al aire este lamento:
¡Ay mi blusa marinera;
siempre me la inflaba el viento
al divisar la escollera!
Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar
y el caballo en la montaña.
Con la sombra en la cintura
ella sueña en su baranda,
verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Verde que te quiero verde.
Bajo la luna gitana,
las cosas la están mirando
y ella no puede mirarlas.
*
Verde que te quiero verde.
Grandes estrellas de escarcha
vienen con el pez de sombra
que abre el camino del alba.
La higuera frota su viento
con la lija de sus ramas,
y el monte, gato garduño,
eriza sus pitas agrias.
Pero ¿quién vendrá? ¿Y por dónde...?
Ella sigue en su baranda,
verde carne, pelo verde,
sonando en la mar amarga.
*
-Compadre, quiero cambiar
mi caballo por su casa,
mi montaña por su espejo,
mi cuchillo por su manta.
Compadre, vengo sangrando,
desde los puertos de Cabra.
-Si yo pudiera, mocito,
este trato se cerraba.
Pero yo ya no soy yo
ni mi casa es ya mi casa.
-Compadre, quiero morir
decentemente en mi cama.
De acero, si puede ser,
con las sábanas de holanda.
¿No ves la herida que tengo
desde el pecho a la garganta?
-Trescientas rosas morenas
lleva tu pechera blanca.
Tu sangre rezuma y huele
alrededor de tu faja.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
-Dejadme subir al menos
hasta las altas barandas,
¡dejadme subir!, dejadme,
hasta las verdes barandas.
Barandales de la luna
por donde retumba el agua.
*
Ya suben los dos compadres
hacia las altas barandas.
Dejando un rastro de sangre.
Dejando un rastro de lágrimas.
Temblaban en los tejados
farolillos de hojalata.
Mil panderos de cristal
herían la madrugada.
*
Verde que te quiero verde,
verde viento, verdes ramas.
Los dos compadres subieron.
El largo viento dejaba
en la boca un raro gusto
de hiel, de menta y de albahaca.
-¡Compadre! ¿Dónde está, dime,
dónde está tu niña amarga?
¡Cuántas veces te esperó!.
¡Cuántas veces te esperara,
cara fresca, negro pelo,
en esta verde baranda!
Sobre el rostro del aljibe
se mecía la gitana.
Verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Un carámbano de luna
la sostiene sobre el agua.
La noche se puso íntima
como una pequeña plaza.
Guardias civiles borrachos
en la puerta golpeaban.
Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar.
Y el caballo en la montaña.
Sí. Cuando quiera yo
la soltaré. Está presa,
aquí arriba, invisible.
Yo la veo en su claro
castillo de cristal, y la vigilan
—cien mil lanzas— los rayos
—cien mil rayos— del sol. Pero de noche,
cerradas las ventanas
para que no la vean
—guiñadoras espías— las estrellas,
la soltaré. (Apretar un botón.)
Caerá toda de arriba
a besarme, a envolverme
de bendición, de claro, de amor, pura.
En el cuarto ella y yo no más, amantes
eternos, ella mi iluminadora
musa dócil en contra
de secretos en masa de la noche
—afuera—
descifraremos formas leves, signos,
perseguidos en mares de blancura
por mí, por ella, artificial princesa,
amada eléctrica.
Blancos, rosas... Azules casi en veta,
retraídos, mentales.
Puntos de luz latente dan señales
de una sombra secreta.
Pero el color, infiel a la penumbra,
se consolida en masa.
Yacente en el verano de la casa,
una forma se alumbra.
Claridad aguzada entre perfiles,
de tan puros tranquilos
que cortan y aniquilan con sus filos
las confusiones viles.
Desnuda está la carne. Su evidencia
se resuelve en reposo.
Monotonía justa: prodigioso
colmo de la presencia.
¡Plenitud inmediata, sin ambiente,
del cuerpo femenino!
Ningún primor: ni voz ni flor. ¿Destino?
¡Oh absoluto presente!
LUIS CERNUDA:
Así como en la roca nunca vemos
La clara flor abrirse,
Entre un pueblo hosco y duro
No brilla hermosamente
El fresco y alto ornato de la vida.
Por esto te mataron, porque eras
Verdor en nuestra tierra árida
Y azul en nuestro oscuro aire.
Leve es la parte de la vida
Que como dioses rescatan los poetas.
El odio y destrucción perduran siempre
Sordamente en la entraña
Toda hiel sempiterna del español terrible,
Que acecha lo cimero
Con su piedra en la mano.
Triste sino nacer
Con algún don ilustre
Aquí, donde los hombres
En su miseria sólo saben
El insulto, la mofa, el recelo profundo
Ante aquel que ilumina las palabras opacas
Por el oculto fuego originario.
La sal de nuestro mundo eras,
Vivo estabas como un rayo de sol,
Y ya es tan sólo tu recuerdo
Quien yerra y pasa, acariciando
El muro de los cuerpos
Con el dejo de las adormideras
Que nuestros predecesores ingirieron
A orillas del olvido.
Si tu ángel acude a la memoria,
Sombras son estos hombres
Que aún palpitan tras las malezas de la tierra;
La muerte se diría
Más viva que la vida
Porque tú estás con ella,
Pasado el arco de tu vasto imperio,
Poblándola de pájaros y hojas
Con tu gracia y tu juventud incomparables.
Aquí la primavera luce ahora.
Mira los radiantes mancebos
Que vivo tanto amaste
Efímeros pasar junto al fulgor del mar.
Desnudos cuerpos bellos que se llevan
Tras de sí los deseos
Con su exquisita forma, y sólo encierran
Amargo zumo, que no alberga su espíritu
Un destello de amor ni de alto pensamiento.
Igual todo prosigue,
Como entonces, tan mágico,
Que parece imposible
La sombra en que has caído.
Mas un inmenso afán oculto advierte
Que su ignoto aguijón tan sólo puede
Aplacarse en nosotros con la muerte,
Como el afán del agua,
A quien no basta esculpirse en las olas,
Sino perderse anónima
En los limbos del mar.
Pero antes no sabías
La realidad más honda de este mundo:
El odio, el triste odio de los hombres,
Que en ti señalar quiso
Por el acero horrible su victoria,
Con tu angustia postrera
Bajo la luz tranquila de Granada,
Distante entre cipreses y laureles,
Y entre tus propias gentes
Y por las mismas manos
Que un día servilmente te halagaran.
Para el poeta la muerte es la victoria;
Un viento demoníaco le impulsa por la vida,
Y si una fuerza ciega
Sin comprensión de amor
Transforma por un crimen
A ti, cantor, en héroe,
Contempla en cambio, hermano,
Cómo entre la tristeza y el desdén
Un poder más magnánimo permite a tus amigos
En un rincón pudrirse libremente.
Tenga tu sombra paz,
Busque otros valles,
Un río donde del viento
Se lleve los sonidos entre juncos
Y lirios y el encanto
Tan viejo de las aguas elocuentes,
En donde el eco como la gloria humana ruede,
Como ella de remoto,
Ajeno como ella y tan estéril.
Halle tu gran afán enajenado
El puro amor de un dios adolescente
Entre el verdor de las rosas eternas;
Porque este ansia divina, perdida aquí en la tierra,
Tras de tanto dolor y dejamiento,
Con su propia grandeza nos advierte
De alguna mente creadora inmensa,
Que concibe al poeta cual lengua de su gloria
Y luego le consuela a través de la muerte
VICENTE ALEIXANDRE:
¿Qué firme arquitectura se levanta
del paisaje, si urgente de belleza,
ordenada, y penetra en la certeza
del aire, sin furor y la suplanta?
Las líneas graves van. Mas de su planta
brota la curva, comba su justeza
en la cima, y respeta la corteza
intacta, cárcel para pompa tanta.
El alto cielo luces meditadas
reparte en ritmos de ponientes cultos,
que sumos logran su mandato recto.
Sus matices sin iris las moradas
del aire rinden al vibrar, ocultos,
y el acorde total clama perfecto.
viernes, 16 de mayo de 2008
-¿Diga?
-(Al otro lado del teléfono) Si perdone por llamar a estas horas...¿Es usted Dolores García la mujer de Javier Fernández?
-Sí ¿por qué le ha pasado algo?
-Bueno señora usted no se preocupe está bien, un chico le encontró en medio del lago Brisa en una barca desnudo y...
-Pero¿está bien?
-Si tranquila venga aquí y se lo explicaremos.
(Dolores se vistió rápidamente y aunque no tenía carnet cogió el coche y fue al hospital. En unos segundos estaba allí)
-(Preguntando en recepción) Perdone soy Dolores García la mujer del hombre que encontraron en una barca en el lago.
-(recepcionista..) Si espere un momento.
-(Una voz reconocida) Perdon ¿es usted la mujer Javier?
-Si señor ¿y usted quién es?
-yo soy Lucas el hombre que le encontró.
-¿Lucas?¿Lucas Suarez?
-Si señora ¿usted me conoce?
-Si fuimos juntos a clase en la universidad.
-Ah usted es dolores..a mi me tenia loquito por sus huesos...
-Lo mismo le digo era el chico más popular y todo el mundo besaba por donde usted pisaba y aunqe me gustases no me quería acercar a ti..
-Bueno nos estamos llendo por los cerros de Ubeda.
-Ya pero es una conversación muy interesante..
-Si tienes razón.
-¿Puedo besarte?
-¿Y su marido?
-Tan solo un beso por esos viejos tiempos..
-De acuerdo tan solo un beso.
(Se besaron pero fuemas que eso...se metieron al cuarto de la limpeza y alli pasó lo que paso...)
Derrepente dolores se despertó y su marido que alli estaba a su lado le pregunto:
-¿Estras bien amor mio?
(Dolores le miro con ojos estrañados)y dijo:
-Si cariño mas nunca te separes de mi..nunca...te quiero.
Jéssica Pérez Fernández 4ºC
viernes, 11 de abril de 2008
LaS 10 PrEgUnTaS PaRa ReSpOnDeR..!!
2-¿Cuál fue el nombre de los tres primeros álbunes de hergé?
3-¿Cuál es el titulo del primer libro de Astérix?¿y el segundo?¿y el tercero?
4-¿Cuál es el nombre del mejor amigo de Asterix?
5-¿Qué significa (ENA)?
6-¿Quién escribió el libro de Astérix?
7-¿Dónde nació René Goscinny?
8-¿Qué soñaba albert Uderzo de niño?
9-¿Qué tipos de bocadillos hay?
10-¿Que dferencia hay en la foto de Tintín entre los hombres que van vestidos de negro con bastón y gorro?